SILENCIO

1. Permaneced en silencio en vuestras faenas diarias, para que la luz de la concentración os asista.

2. Buscad el silencio durante el día, para que os escuchéis internamente.

3. Haced del silencio vuestro Maestro, para que os guíe por sendas de paz y armonía.

4. Que el Maestro del silencio, os acompañe siempre para que escuchéis sus sabias enseñanzas.

5. Hablad estrictamente lo necesario, para que cada una de vuestras palabras sea modulada por el Aliento Divino.

6. Cuidad y vigilad vuestras palabras, para que sean como perlas que guardáis en el cofre de vuestra boca, que al abrirlo extasíen a vuestros hermanos.

7. Vigilad que el aliento que modulan vuestras palabras, sea el aliento del Santo Espíritu, del Padre Creador puro y perfecto.

8. Que vuestras palabras medidas y controladas, sean el agua pura y cristalina en la que se miren vuestros hermanos.

9. Cuidaos del exceso de palabras, para que no desperdiciéis la Energía Vital, sed breve y concreto.

10. Cuidad y vigilad vuestro acento, que sea el néctar que acompañe vuestras palabras.

11. Vigilad y cuidad que vuestras palabras no dañen, ni lastimen a nadie ni a nada.

12. Ved siempre la Presencia del Padre Dios en toda su creación, para que habléis con EL en todo cuanto os rodea y uséis el acento con que le hablaríais a Dios.

13. Hablad poco para que vuestro espíritu se fortalezca y podáis enfrentaros, valerosamente, en vuestras luchas internas

14. Emplead siempre un acento suave y bajo, que acompañe vuestras palabras.

15. Recordad y tened presente, que vuestras palabras retumban por toda la tierra y por los universos.

16. Sabed que de vuestras palabras depende el equilibrio universal.

17. Debéis tener presente, que la palabra emitida regresa con fuerza al mismo lugar.

18. Siempre que os sintáis conversadores, retornad al silencio.

19. Llevad una vida silenciosa y meditativa, que os conduzca por senda de luz.

20. Que vuestro pensamiento, vuestro sentimiento y vuestra palabra, sean guiados por el silencio.

21. Pensad y discurrid en la Energía Divina Todopoderosa, presente en vosotros permanentemente y en el uso puro y perfecto que le dais.

22. Que vuestros actos sean el reflejo de vuestro buen pensar y de vuestro buen sentir.

23. Haced que vuestros actos, sean las palabras que hablen en el silencio, de vuestro gran amor.

24. Que cada acto que realicéis durante el día, sea la fuerza que mueva a vuestros hermanos al cambio interno.

25. Tened presente, que vuestro actuar debe ser el reflejo de vuestro silencioso mundo interior.

En Amoroso Servicio

Fraternidad Rosacruz de México

Centro de Estudios de la Sabiduría Occidental México