MEDITACION CONCENTRACION Y ORACION

MEDITACION CONCENTRACION Y ORACION

Abordemos ahora el tema de la Meditación, que forma parte de toda Enseñanza Espiritual y es de suma importancia en la búsqueda de la verdad, para cada uno de los Estudiantes de las Enseñanzas Rosacruces.

De inmediato surge esta pregunta:

¿Cómo debe realizarse el ejercicio de la meditación para el aspirante a la verdad, en su investigación sobre los misterios de la naturaleza?

Este ejercicio es el medio indispensable para quien busca el oro del Espíritu.

Es, en realidad, como un minero que recorre las riquezas espirituales, no con miras a la satisfacción material por la que miles de almas han sacrificado su vida o largos años de trabajo, sino en la búsqueda, como aspirante a la verdad, de una mucho más oro precioso, de valor inconmensurablemente mayor, el Oro del Espíritu.

Así como el minero debe ser fuerte, vigoroso, apto para soportar las penalidades y tribulaciones relacionadas con su trabajo, así el minero de oro del Espíritu debe estar provisto de un cuerpo físico del cual tenga dominio, del cual sabemos se requiere mucho tiempo si no es toda la vida para llevarlo a cabo.

Debe haberlo purificado a través de su forma de vida, debe proporcionarle una dieta saludable que mantenga pura su sangre y asegure el buen funcionamiento de sus órganos, aqui llevar el lema siempre en nuestro pensamiento "Una Mente Pura, Un Corazon Noble, Un Cuerpo Sano"

El buscador de oro de la verdad puede buscar todas las organizaciones, todos los campos intelectuales, asistir a diversas conferencias de oradores talentosos e ilustrados, pagar lecciones de instructores renombrados o sentarse a los pies de sabios guías a los que llama maestros y descansar a la sombra de su conocimiento adquirido.

Al estar en contacto con ellos puede sentirse exaltado, elevado al séptimo cielo, se rodea y es afin en su derredor ambiente.

Si su cuerpo y su espíritu no vibran al unísono de la verdad que busca, si sigue atado por el materialismo o si, invadido por el egoísmo, acepta sin dar nada de sí mismo, cuándo abandonar las conferencias, las lecciones, la actividad intelectual o comunicaciones de las enseñanzas, pronto perderá todo lo que deseaba adquirir.

Nos pasa porque ni su cuerpo ni su espíritu, estaban a la altura de las enseñanzas demasiado elevadas para él, las cuales sólo pueden ser asimiladas gracias a un instrumento capacitado para recibir las verdades espirituales y que en parte comprende la inmensa necesidad de darse a si mismo y con ello comprende la importante necesidad de participar en los Servicios Devocionales.

En el Sermón de la Montaña nuestro Amado Maestro e Ideal en las bienaventuranzas dejo dicho:

"Bienaventurados los de espíritu puro, porque ellos verán a Dios"

Ejemplo concreto, que si queremos conseguir agua pura debemos tener un recipiente escrupulosamente limpio.

De lo contrario, este recipiente, incluso sumergido en la fuente más pura, solo puede contener un líquido contaminado.

(Ritual del Servicio de Sanación)

Cristo Jesús, acercándose a la fuente, habla a la samaritana del agua viva:

"El que beba de esta agua", dijo, señalando el agua de la vasija,

"aún tendrá sed; pero el que beba del agua que yo le des, no volverá a tener sed jamás.

El agua que le des se convertirá en él en manantial de agua que brotará para vida eterna”.

Todo aspirante a la verdad tiene sed de esa agua viva de la que habla Jesucristo, de esa verdad espiritual que está en todas partes, pero que muy pocos son capaces de encontrar; que en todo, pero que muy pocos son capaces de tomar.

Pero, ¿por qué el hombre ha perdido lo que una vez poseyó?

¿Por qué se ha apartado de la verdad?

En los tiempos muy lejanos de su evolución fue inconsciente de las alturas espirituales.

Esta facultad se ha perdido, este poder ha sido sacrificado en el altar de los placeres de los sentidos físicos, al descender en un proceso Involutivo lo que lo ha alejado de los reinos celestiales, que ahora anhela alcanzar de nuevo.

Ahora al ascender y comenzar su proceso evolutivo, deberá reconstruir estos sentidos sutiles, ahora profundamente inmersos en la materia, a costa de una voluntad inflexible e incesantes esfuerzos.

Como el minero, debe inspeccionar y perseverar.

El hombre carnal, gobernado por su Yo Inferior debe ser vencido.

El anfitrión pronto ahuyentará al intruso, ignominiosamente.

En la "Cosmología Rosacruz" se dice que: "Dado que el cuerpo de deseos y la mente aún no están bien organizados, no pueden ser utilizados como vehículos separados de la conciencia.

El cuerpo vital no puede abandonar el cuerpo físico, ya que se correría el riesgo lo que es evidente, pues, que deben tomarse ciertas medidas para obtener un vehículo organizado, fluido y construido de tal manera que satisfaga las necesidades del Ego en los mundos internos, como es el caso del cuerpo físico en los mundos internos. mundo físico ".

Para hacer este vestido de novia, el cuerpo-alma, el aspirante primero debe aprender a concentrarse, de ahi su importancia al ser dado como Ejercicio Científico por los H.M. de la O.R.

Por ello debe ser capaz de controlar, hasta cierto punto, sus pensamientos y mantenerlos durante mucho tiempo sobre el mismo tema u objeto, para llegar a representarlos en el espíritu.

El primer paso es adquirir cierto grado de control y dominio de los propios pensamientos durante la concentración.

Cuando el aspirante ha logrado evitar que sus pensamientos se desvíen, puede dar el segundo paso: la meditación.

La meditación consiste en tener un ideal ante los ojos del espíritu, estudiándolo en todos los sentidos hasta que se hace realidad, se desarrolla y el espíritu comienza a percibir todo lo que se refiere a ese ideal evocado antes de la concentración.

Si la Concentración y la Meditación van acompañadas de la oración, constituyen entonces herramientas muy poderosas y seguras para el desarrollo de las cualidades latentes del espíritu.

Usándolos en una vida vivida en pureza y abnegación, sirviendo a la humanidad lo mejor posible, el aspirante no puede dejar de lograr su ansiado objetivo.

Uno de los obstáculos más comunes, uno de los mayores peligros en el Camino, de quedar atrapados por las pequeñas mezquindades de la vida: críticas inmerecidas, comentarios desagradables, sentimientos de celos que nos rodean.

Estas pequeñas cosas tienen gran importancia y son como muchas tentaciones, oportunidades que ganar, en el camino de la preparación.

El aspirante debe cultivar la consideración: debe esforzarse por mantener la calma frente a las pequeñas o grandes molestias de la vida diaria.

También debe vigilar sus pensamientos, sus sentimientos.

Nos tienta el sentimiento de malevolencia contra una persona por la que no sentimos simpatía. el momento de poner en uso:

"Vigilad sin cesar: es más fácil sucumbir en las cosas pequeñas que en las grandes pruebas".

Es cierto, que al emprender el Camino del desarrollo espiritual, aceleramos nuestro trabajo evolutivo, poniendo en juego nuestras deudas del destino, cuyo pago, en el curso habitual de la vida, se habría postergado.

No podemos sustraernos de reparar todo mal pensamiento, palabra y obra cometidos en esta vida o en existencias anteriores; "hay que pagar hasta el último céntimo" y es preferible, cuando tengas fuerzas, realizarlo.

Una vez informado sobre la naturaleza de Dios, las leyes universales y el conocimiento de sí mismo, el aspirante ya no podrá crearse las nuevas deudas del destino: "el hombre libre será dueño de su vida, y no más esclavo al propio entorno”.

La Filosofía Rosacruz Enseña que el hombre es una chispa de su propio Padre divino, de quien posee todas las prerrogativas, que hace su formación como dios en evolución, esto a través de las experiencias experimentadas dentro de sus vehículos o cuerpos; el destino del hombre llegar a ser tan puro y santo como su creador: por lo tanto, que mejor que empezar inmediatamente a trabajar y ejercite sus cualidades, dedíquese al estudio de sí mismo, busque la chispa divina que ha mantenido escondida durante tanto tiempo y, finalmente, pueda ella expresarse.

Sabemos que la mente es la conjunción entre el hombre físico y el hombre espiritual, que por el mal uso de la mente el hombre se vuelve degenerado.

Pero también sabemos que el espíritu del hombre se nutre del alma, de la asimilación de las experiencias de su vida, de la expansión de su propia conciencia.

Si el hombre comienza a controlar sus pensamientos practicando la concentración, si aplica la meditación en conceptos superiores, llenará su vida de pensamientos mas elevados y constructivos.

Para hacer de la vida una oración continua, no es necesario arrodillarse ante un altar, sino hacer de los pensamientos y de las acciones una sumisión continua a la voluntad de Dios, entonces el Dios interno comenzará a expresarse, y cuando la concentración, la la meditación y la oración se habrán convertido en factores vivos de su vida, ya no necesitará mirar fuera de ese agua viva de la que habla Cristo, porque él mismo se habrá convertido en fuente de agua vital, de la que vendrán a saciar su sed, todos aquellos que necesitarán ayuda espiritual como un valioso instrumento en la Gran Obra Divina.

Un pensamiento para concluir

No huyamos de nosotros mismos, sino encontrémonos y hablemos con el ser que hay en nosotros, tratando de comprender todas nuestras tensiones, sufrimientos, miedos y angustias y llevémoslos al corazón, donde se transformarán en armonía, alegría y amor.

Amar significa querer que los demás sean felices, una cualidad natural de la mente que permanece limitada.

Si nos ponemos en contacto con el centro del corazón, descubriremos que es posible amar verdaderamente, más allá de nuestra felicidad, que los demás también sean felices, sea cual sea la relación que tengan con nosotros, tenemos el potencial de enviar amor y serenidad a todos.

Los seres vivos, incluso aquellos que nos odian, nos combaten o nos crean problemas y tensiones.

Mantenemos una mente abierta, tratando de superar las actitudes perjudiciales del Yo Inferior y dejamos espacio en nuestro corazón para desarrollar un amor puro y universal, así se crearan las bases del ideal Rosacruz con la Fraternidad Universal.

En Amoroso Servicio

Centro de Estudios de la Sabiduría Occidental Mexico

Rafael Iñiguez Herrera