"OBSERVEMOS LA NAVIDAD

LECCION DE FILOSOFIA 

NOVIEMBRE-DICIEMBRE DE 1997

La Navidad marca la divina expresión del amor de Dios, al enviar al mundo a Su único Hijo engendrado para llamar a los hijos de la tierra a volverse a su Padre Celestial. 

Esta llamada, ha evocado una respuesta de eco por parte de la humanidad, una llamada de respuesta que aumentará su volumen hasta que cada átomo del universo entero haya sido penetrado con cada repetición de esta temporada espiritual, más personas en todo el mundo, a causa de la eterna hambre interna, están despenando a la esencia espiritual, la cual es enviada al mundo mediante el Hijo. 

Por medio del sufrimiento y la angustia que le han acarreado el pecado, el egoísmo y la violencia, el hombre por fin se ve obligado a volverse de las tinieblas a la LUZ. Llegará el tiempo en que la tierra entera responda con toda su alma a la aceptación y adoración del Cristo, "el Verbo"

A medida que entrarnos a la Santa Temporada de Navidad con nuestra consciencia y comprensión de lo que este tiempo verdaderamente significa en términos del sacrificio anual del Señor Cristo, podernos únicamente desear que más hombres puedan comprender este extraordinario don de Amor de nuestro Padre Celestial Somos cada uno de nosotros un Cristo en formación, y únicamente cultivando el Cristo interno podemos esperar percibir el Cristo externo, apresurando así nuestra iluminación espiritual. 

El Espíritu que es el hombre siempre anhela expresar la divina imagen que fue estampada sobre él "en el Principio", y conocerse a sí mismo es el primer paso para obtener la capacidad de practicar el autoanálisis crítico que debe siempre preceder a la comprensión inteligente y la determinación de alcanzar la verdad. 

El fracaso en desarrollar este potencial latente en todo ser humano hace que la mente siga siendo vulnerable a toda clase de falsas suposiciones e ideales. En tanto que una persona acepte esto ciegamente, su progreso es 'mutado. 

La naturaleza espiritual del hombre se desarrolla cuando su carácter se desarrolla "Como el hombre piensa dentro de sí mismo, así es él" es una afirmación de la ley, que no tiene excepciones.

La Gran mayoría de las personas han formado el hábito del pensamiento indiferente, que las hace incapaces de concentrarse sobre cualquier tema hasta que sea totalmente dominado. 

Aunque los pensamientos que se filtran en la mente pueden ser buenos, malos o indiferentes, la mente no se adhiere usualmente a ninguno de ellos el tiempo suficiente para aprender su naturaleza. 

El control mental es a menudo muy difícil de alcanzar, pero es una clave muy importante para sus asuntos. 

Como sabe cualquiera a quien se le haya dado el don de tocar un instrumento musical, es sólo después de horas de repetición y práctica que se puede llegar a tocar algunas piezas musicales con perfecta facilidad y consumada destreza. 

Así también un estado mental al principio aparentemente imposible de realización es al fin adquirido y asimilado en el carácter como condición natural y espontánea. 

En este poder de la mente para formar y reformar sus hábitos y sus condiciones, está contenido la base de la salvación del hombre y la puerta abierta que conduce a la perfecta libertad por medio del dominio de sí mismo, porque, así como uno tiene el poder de formar hábitos, también uno tiene el mismo poder de crear hábitos esencialmente buenos.

En este asunto de formar modelos de buenos hábitos, se nos enseña en la Sabiduría Occidental que es muy necesario, pero a menudo descuidado hábito es la observación, y es una de las más importantes ayudas para el aspirante espiritual. Max Heindel escribió en Conferencias de Cristianismo, lo siguiente: 

"La observación y la acción generan el alma consciente. 

Es de la más alta importancia para nuestro desarrollo que observemos las escenas y sonidos de nuestro alrededor correctamente; de otro modo los cuadros de nuestra memoria consciente no coinciden con los registros automáticos subconscientes. 

El ritmo y la armonía del cuerpo denso se desordenan en proporción directa a la inexactitud de nuestra observación durante el día. En la medida en que aprendamos a observar correctamente, obtendremos salud y longevidad, y necesitaremos menos reposo y sueño".

 De esta manera vemos la gran importancia de la observación correcta

Max Heindel también dio un muy buen consejo en "El Velo del Destino" donde dice que "a menos de que nuestra vida entera, tanto despiertos como ensueños, sea una oración para la iluminación y la santificación, nuestras plegarias no alcanzarán nunca la Divina Presencia para traemos el bautismo de Su Poder. 

"Ora y trabaja"...es un mandato moho, que todos los aspirantes deben obedecer, o por el contrario no realizarán grandes adelantos". 

Otro importante paso en nuestro viaje hacia la realización es la adquisición del EQUILIBRIO, del cual se nos dice que es la posesión más valiosa del Ego y eleva al hombre que lo tiene por encima del tempestuoso mar de las emociones, al reino de la eterna paz que sobrepuja todo entendimiento. 

Cuando ha llegado a ese punto de su desarrollo, ni Saturno, ni Júpiter, ni ninguno de los otros Espíritus Planetarios tendrá el poder de conmoverlo, porque entonces ha aprendido a dominar sus estrellas y a regular su destino de acuerdo con su propia voluntad divina" 

La persona equilibrada y dueña de sí misma es discreta y comprensiva en cualquier circunstancia o situación, e irradia esta. virtud a los que le rodean. 

Ha encontrado el "Lugar Secreto" y mora en él. Como dice Pablo: 

"He aprendido, en cualquier situación que este, a estar contento en ella".

Gocemos y participemos de esta Santa Temporada de Navidad y de todos los beneficios y oportunidades, comprendiendo enteramente que la vida es progreso, consecución y dominio final. 

Todas y cada una de las nuevas aspiraciones espirituales, hacen la contextura del alma más fina, fuerte y más bella, engendrando el poder de extraer de lo invisible el cumplimiento de sus más elevados ideales. 

El proceso redentor debe ser llevado a cabo en todo el ser; no importa donde estemos en la escala de la vida, no debemos nunca desanimamos. 

Tras de todo está el eterno Plan de Dios, y Su Amor está con nosotros en todo paso del camino, ayudándonos a llevar a la expresión Su perfección. Que disfrutemos de nuestro tiempo de Navidad con sincera gratitud por todo lo que nuestro Padre Celestial ha proveído, y que podarnos compartir Su Amor y Luz alegre y entusiásticamente con todos los que encontremos, porque no hay mejor forma de celebrar la Navidad.

En Amoroso Servicio

Centro de Estudios de la Sabiduría Occidental Mexico.