Adepto: Primer nivel de un Iniciado en las Iniciaciones Mayores o Cristianas

Un Adepto es una persona que se ha graduado al menos de la primera Iniciación Mayor o Cristiana, lo que significa que ha alcanzado y aprobado las nueve Iniciaciones Menores y, por lo tanto, calificado para las cuatro Iniciaciones Mayores o Iniciaciones Cristianas. 

Cuando el Adepto pasa por la primera Iniciación Mayor, pasa por un proceso alquímico que incluye una transmutación biológica que cambia la relación entre sus Cuerpos Denso y Vital, así como el cuerpo de deseos y la Mente, utilizando todo el poder aprovechado por el Traje de Bodas de Oro, el Alma-Cuerpo.

Espiritualizando la Mente con prácticas espirituales, con disciplina mental y positiva, con pensamientos edificantes y otros usos constructivos de la Mente, dan forma a sus Mentes abstractas y concretas para procesar más luz Espiritual. 

El vehículo de la Mente se transforma en el Cuerpo Mental. 

Al purificar y elevar el Cuerpo del Deseo, el vehículo a través del cual expresamos deseos, sentimientos y emociones, se conecta con las tres Regiones superiores del Mundo del Deseo (Vida del Alma, Poder del Alma, Luz del Alma), activando sentimientos, deseos y emociones más nobles, más compasivos y más desinteresados para crear una conexión con el Alma con los demás y con el Universo. 

Al activar más energías etéricas con buenos hábitos e intenciones diarias, mejor higiene, uso responsable de la fuerza creativa y repetición de buenas acciones, hechos y buenas acciones, aumenta en gran medida la cantidad de los dos Éteres Superiores del Cuerpo Vital, a saber, el Éter Luminoso y el Éter Reflectante (Éteres involucrados en la percepción sensorial, la memoria, la cognición mental y la actividad). 

Esto le permite hacer un mejor trabajo en los planos internos como un Ayudante Invisible con una Conciencia plena: "ciudadano de dos Mundos".

Mantienen su cuerpo denso saludable, con una cantidad mínima de ejercicio físico; siguen una nutrición adecuada, comen muy poco y asimilan cantidades suficientes de fósforo en el cuerpo denso; se involucran en actividades positivas y constructivas y tienen un estilo de vida altamente espiritual; así y cuando están listos, los Adeptos comienzan conscientemente la transmutación alquímica de su estructura bioquímica: de una base de carbono a una química basada en fósforo. 

El carbono tiene cuatro valencias, el fósforo tiene cinco; por lo tanto, se cambia la base química. 

Este proceso es, en esencia, el medio por el cual se vuelven invisibles y les permite navegar entre la Región Química del Mundo Físico (el Mundo Visible) y los Mundos Invisibles (la Región Etérica del Mundo Físico, el Mundo del Deseo y el Mundo del Pensamiento).

Entonces poseen la capacidad de materializar y desmaterializar el cuerpo denso voluntariamente. 

Esto les permite ofrecer un mayor servicio a la Humanidad, actuar como Ayudantes Invisibles altamente desarrollados donde y como lo necesiten, como personas en gobiernos, científicos, artistas, filósofos, inventores, pensadores u otros individuos creativos. Ayudan a promover el avance de la cultura en general en áreas de arte, ciencia y religión.

(de una exposición en Pró-Ecclesia en noviembre/2009 – La Fraternidad Rosacruz – Traducido en Amoroso Servicio por la Fraternidad Rosacruz de Mexico.