SED CONSCIENTE

1. Sed consciente que cada pensamiento, cada sentimiento y cada acción son las enseñanzas que dais al mundo.

2. Realizad vuestra diario vivir, con la conciencia, que sois un servidor del Dios Padre Creador a toda su creación.

3. Bendecid y alabad en el silencio, a vuestro Creador en cada aliento que anima vuestro pequeño ser.

4. Sed paciente y tolerante con vuestra mente, para que se armonice y obedezca a vuestro mandato amoroso.

5. Escuchad en el silencio el latir de vuestro corazón y sentid la presencia del divino amor con vuestra auto observación interior.

6. Vivid siempre consciente de la Presencia del Padre Celestial, manifestada permanentemente en vos.

7. Cuidad y guardad vuestra pureza interior, ya que es el más valioso tesoro, que os conduce al Divino amor.

8. Practicad diariamente el recogimiento interior, en vuestros momentos de soledad.

9. En vuestro silencio negaos así mismos, para que seáis templados internamente.

10. Renunciad constantemente, aquello que os distraiga o aleje de vuestro recogimiento interior.

11. Mirad todo cuanto os rodea, con alegría y alabad a Dios Padre Creador

12. Que vuestro espíritu se regocije en Dios Padre y en todo cuanto EL os da.

13. Contad en el silencio de vuestro corazón las veces, que con los latidos, el Padre Creador os declara su amor.

14. Ofreced, silenciosamente, todas vuestras actividades, por el despertar interior de la humanidad.

15. Que vuestro mundo interior sea el rosal, donde cada día cultivéis el amor de Dios Padre, presente en todo.

16. Que el fervor y la concentración sean los báculos, en que apoyéis vuestra oración silenciosa.

17. Haced de cada día una oración que llegue a vuestro Padre Celestial, en cada actividad realizada.

18. Edificad en vuestro interno, con vuestros pensamientos y sentimientos puros, un mundo de paz y serenidad.

19. Retiraos con frecuencia y buscad la soledad, para que os acerquéis más al mundo del espíritu.

20. Orad, consciente que vuestra oración repercute en los universos y es escuchada.

21. Haced de vuestro corazón un edén de amor, donde Dios Amor se regocije y deleite.

22. Cerrad vuestros ojos cuando oréis, para que la luz de la concentración descienda y os conectéis con los reinos celestiales.

23. Que cada día vuestra mente se purifique con vuestro puro pensar, para que lleguen a ella deidades celestiales.

24. Brindad en el día un holocausto de amor, en vuestro corazón al Padre Celestial.

25. Pensad que cada paso que dais durante el día, os aproxima más a vuestro Padre Creador.

En Amoroso Servicio

Fraternidad Rosacruz de México

Centro de Estudios de la Sabiduría Occidental México